En mayo de 2019, Estados Unidos declaró que Huawei era “una amenaza para la seguridad nacional”, convirtiéndose así en la primera gran víctima de la guerra comercial contra China. Sin poder usar tecnología estadounidense, la compañía parecía herida de muerte, o eso se creía entonces. Hoy, Huawei no solo ha logrado volver a la cima de los móviles en China, sino que también se ha convertido en el estandarte de la independencia tecnológica.
**Un 57%.** Es el porcentaje de componentes de fabricación china que se pueden encontrar en el Huawei Mate 70 Ultra lanzado en 2024 y el Huawei Pura 80 Ultra lanzado este mismo año. Así lo revela un análisis de Nikkei Asia, que en colaboración con la firma japonesa Fomalhaut Techno Solutions, ha desmontado ambos modelos para examinar sus componentes internos. Esta cifra es el resultado de seis años de esfuerzos para lograr la autosuficiencia tecnológica a pesar de los vetos.
**El punto de inflexión.** El veto estadounidense obligó a Huawei a buscar alternativas y crear nuevas cadenas de suministro nacionales. En 2020, el porcentaje de componentes chinos en sus buques insignia era solo del 19%, y en 2023 aumentó al 32%. Alcanzar el 57% en 2024 supone un salto de 25 puntos porcentuales. Los países de donde provenían la mayoría de los componentes que Huawei ha logrado sustituir eran Japón, Estados Unidos y Corea del Sur.
**Procesador.** El corazón de estos dispositivos es el Kirin 9020, el primer procesador fabricado íntegramente en China y el componente más crítico de todos. Se trata de un chip de 7 nm fabricado por SMIC. Para lograr este proceso de 7 nanómetros, habrían empleado técnicas de multi-patrón, una proeza técnica teniendo en cuenta que no tienen acceso a las máquinas más avanzadas, sino que lo han conseguido adaptando equipos de ASML más antiguos.
**Más componentes.** Hay otras piezas clave que también se fabrican íntegramente en China, como la memoria RAM, a cargo de ChangXin Memory Technologies, o el almacenamiento, producido por Yangtze Memory Technologies. En cuanto a las pantallas OLED, casi todos sus componentes son chinos, concretamente de la empresa BOE Technology Group.
**Retos.** El veto de 2019 fue un golpe casi mortal para Huawei; sus ventas cayeron de forma dramática y hubo momentos de seria incertidumbre sobre su continuidad, hasta que comenzó a resurgir. Lograr fabricar componentes críticos en China es un logro enorme, pero la realidad es que, tecnológicamente, Huawei aún va por detrás. Para ponerlo en contexto, el Kirin 9020 lanzado en 2024 se sitúa a un nivel similar al Snapdragon 855 o el A12 Bionic, lanzados en 2018.
El reto ahora es acortar distancias, y Huawei ya está en ello. El Huawei Mate 80 Pro incorpora el Kirin 9030, que ha logrado superar la barrera de los 7 nm y llegar a los 5 nm. Además, filtraciones recientes indican que han logrado replicar una máquina UVE de ASML, lo que les permitiría avanzar aún más, aunque de momento no está lista para la producción comercial de chips.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**